En su Autobiografía Flavio Josefo parte de su niñez, pone de relieve su linaje fariseo que desciende de los sacerdotes y tiene estirpe real. Relata que a los 16 años estudió las sectas de los fariseos, saduceos y esenios y que, al no quedar satisfecho con ninguna de ellas, se hizo discípulo de un tal Banus, “que vivía en el desierto usando como vestido lo que le proporcionaban los árboles”, con el que permaneció tres años. Finalmente, con 19 años, volvió a Jerusalén y, en calidad de fariseo, comenzó a intervenir en la vida pública
Posteriormente tomó las armas contra Roma hasta que fue derrotado en Jotapa y conducido a prisión donde fue tratado “con toda clase de atenciones, pues Vespasiano me mostraba su estima de muchas maneras”. De esta manera se incorporó al bando romano, lo que le permitió asistir acompañando a Tito a la toma de Jerusalén (73 d.C.)10. En lo sucesivo recibió la protección de la dinastía Flavia, sin que por ello tuviera que renunciar a su ascendencia y cultura judía.
Se trasladó a Roma donde recibió toda clase de atenciones de Vespasiano: que le concedió la ciudadanía romana, le dio una pensión, le cedió una casa suya y le hizo dueño de “una importante propiedad en Judea” .
Con la llegada al poder de Domiciano, el último de los emperadores de la Dinastía Flavia, termina la Autobiografía, aunque parece que el final es provisional ya que el autor escribe: "Por el momento, pongo fin en este punto a mi relato". Debió de fallecer cuatro años más tarde.
Flavio Josefo a (Jerusalén, c. 37-Roma.c. 100) fue un historiador judío fariseo, descendiente de una familia de sacerdotes. Hombre de acción, estadista y diplomático, fue uno de los caudillos de la rebelión de los judíos contra los romanos. Apresado y trasladado a Roma, llegó a ser favorito de la familia imperial Flavia. En Roma escribió en griego sus obras más conocidas: La guerra de los judíos, Antigüedades judías, Autobiografía y Contra Apión. Fue considerado como un traidor a la causa judía y odiado por los judíos. Su obra fue preservada por los romanos y los cristianos.