Pero lo que cuento en este libro es OTRA COSA: Para mí, ha significado la constatación de que hay determinadas fuerzas y señales que, si las atendemos y las seguimos, pueden prolongar nuestra estancia en este mundo, siempre y cuando «nuestra misión» no haya sido completada.
De señales, de esperanza, de controlar el miedo, de no rendirse, de entregarse, de ser consciente, de comprender el sentido de la vida, de AMOR... va este libro.
Miles de personas me han escrito y confesado de qué manera les ha ayudado y cómo les ha cambiado la vida. Por ello lo escribí y para eso ahora lo reedito. Solo pido que, a quien lo lea y le toque el alma, lo regale a quien sienta que también le va a ayudar.