Pensilvania. Época actual. Descubren una mano amputada en una caja de seguridad que lleva cerrada más de cincuenta años. La nota que envuelve la extremidad, escrita en antiguo eslavo, dice que es la mano derecha de Rasputín, el legendario monje que murió en 1916. Aun así, está en perfecto estado de conservación, y de la herida todavía brota sangre. Los fieles creen que las reliquias tienen el poder de curar. Sin embargo, todos aquellos que entran en contacto con la mano empiezan a morir. Esta extraña serie de defunciones es el pistoletazo de salida de una carrera contrarreloj; cuando Victor Rhostok empieza a investigar, se ve arrastrado a una red de misticismo y superstición rusa.