Este estudio etnográfico, con su original enfoque en busca del entendimiento de lo que existe en el interior de las escuelas, resulta una contribución importante a la teoría educativa radical. El escenario es una escuela urbana católica ubicada en Toronto, Canadá, cuya población estudiantil se encuentra constituida en su mayor parte por portugueses e italianos. El autor incursiona en el campo interdisciplinario de los estudios acerca del ritual, para desarrollar un singular marco teórico que ayude en la comprensión de la dinámica política y cultural del proceso escolar, la reproducción del capital cultural de la clase media y de la propia sociedad capitalista. McLaren describe el aula no sólo como un espacio educativo, sino también como un territorio en el cual se dirimen, en términos simbólicos, conflictos de clase, étnicos y generacionales.