Llegará el día en que surja el gran adivino. Vendrá de donde nadie sabe, de donde nadie puede imaginar…
…Retumbará el gran trueno que agitará los mares y estremecerá las piedras. Nadie podrá dejar de escucharlo, pues es señal de que los tiempos cambien, y habrán de cambiar.
…Y prepárese a enfrentar la tormenta el hombre que ostente la corona de los hombres, porque al que viene lo acompañan fuerzas y sabidurías inigualables, pues no será nacido de mujer y será uno de muchos, y muchos estarán con él.
Fragmento de la profecía del Libro de Uxmal.