El exitoso y apuesto neoyorquino Brandon (Michael Fassbender) parece llevar una vid ordinaria, pero él oculta un terrible secreto debajo de la máscara de la normalidad: Brandon es un adicto sexual. Su constante necesidad por una gratificación adormece casi todo lo demás. Pero, cuando Sissy (Carey Mulligan), la necesitada hermana de Brandon, llega inesperadamente a la ciudad, entra a su departamento e invade su privacidad, Brandon finalmente es obligado a confrontar su adicción.