Durante la Segunda Guerra Mundial, Rufino es un joven sacerdote de la orden de los franciscanos en el monasterio de asís. Un día recibe la visita de Nicolini, un obispo que le encarga la importante misión de proteger a las familias judías perseguidas por los nazis. Rufino abre las puertas de su monasterio para todas aquellas personas que quieran esconderse de los nazis. El joven religioso evitará que numerosas familias sean víctimas del holocausto pero tendrá que enfrentarse a los alemanes.