Carrie, una tímida adolescente que vive con su madre, una fanática religiosa, es el objeto de las burlas constantes de sus compañeros de de la escuela. Cuando la chica sufre un ataque de histeria al tener su primera menstruación en las duchas del gimnasio, una de las alumnas decide gastarle una macabra broma durante la fiesta de graduación. Lo que todos ignoran es que Carrie posee poderes telequinéticos.