Cuando Danny era un niño ayudó a su padre a traer al mundo a una hermosa niña llamada Ann. Desde el primer momento que la vio pensó que en el futuro se casaría con ella. Veinticinco años más tarde, Danny se encuentra casualmente con Ann. La familia de la chica lo acoge como si fuera un miembro más y él les contagia sus ganas de vivir. Aunque Ann ya tiene novio, Danny no se da por vencido y quiere conquistarla.