En este arquetípico drama de ansiedad y rebelión adolescente, tres estudiantes de secundaria que deberían llevar idílicas vidas en sus estables, cómodas familias suburbanas explotan con una violencia y sexualidad que sus padres no pueden entender. Esta película--que tiró la fachada del sueño americano de la posguerra para exponer la furia de la juventud del país--resuena con una energía que la ha hecho un clásico moderno y una poderosa historia de madurez.