Backgammon es un juego de dos jugadores en el que cada jugador tiene quince piezas. Estas piezas se mueven a lo largo de veinticuatro 'puntos' según la tirada de dos dados. El objetivo del juego es mover las quince piezas por el tablero y ser el primero en sacarlas, es decir, sacarlas del tablero.
Backgammon implica una combinación de estrategia y suerte (de tirar los dados). Si bien los dados pueden determinar el resultado de un solo juego, el mejor jugador acumulará el mejor registro en una serie de muchos juegos. Con cada tirada de dados, los jugadores deben elegir entre numerosas opciones para mover sus piezas y anticipar posibles contraataques del oponente. El uso opcional de un cubo de duplicación permite a los jugadores aumentar las apuestas durante el juego.