Este libro es fruto de un paréntesis del autor para «desintoxicarse» y reflexionar, durante el cual encontró en la escritura una forma más de expresarse, ordenando las ideas que uno raramente se para a analizar y que, sin embargo, determinan nuestra actuación y nos definen como personas. Abandonar una prometedora carrera de dirección de empresas en ESADE por la incertidumbre que le creó el teatro; dedicarse durante cuatro días únicamente a cantar, comer y cagar para conseguir un papel en un musical; definir a Jorge Javier Vázquez como «el mejor fabricante de cerillas»; confesar que nunca le hablaría de usted a Jordi Pujol; vestirse con un abrigo negro de cuero hasta los pies como Neo en Matrix para inventarse un puesto de trabajo o hacer de valla publicitaria humana vestido de aviador en lo alto de una marquesina, son algunas de las vivencias que Llàcer usa para desgranar conceptos como la vocación, el esfuerzo, el compromiso, el estatus, la dignidad, el sentido del humor, la empatía o la coherencia. Todo con la única finalidad de tratar de disfrutar de la vida y ser feliz.
Parece difícil, ¡pero no lo es! no es un libro de autoayuda, es un libro de auto-autoayuda gracias al cual Àngel Llàcer ha ordenado sus pensamientos, creencias y visiones de la vida y de las personas. Únicamente pretende poner sobre la mesa una serie de reflexiones para que el lector pase un buen rato.