Engañaron al mundo, pero lo que sentían era real... Lucca llevaba un año sumido en la desesperación, sin saber por qué había desaparecido Delphine Alexander de su vida y de su cama. Pero, tras localizarla, tuvo por fin la posibilidad de acabar con el escándalo que rodeaba a su familia. Solo faltaba que ella aceptara su plan. Por su parte, Delphie necesitaba a Lucca para que salvara su escudería de coches de carreras, pero el precio era alto. Tendría que estar todo un mes a su lado, fingiendo ser su pareja ante la opinión pública, lo cual los conduciría a un choque tan inevitable como tórrido. A fin de cuentas, era consciente del efecto que Lucca tenía en ella, y sabía que terminaría revelando la razón por la que se había marchado.