¿Casarse con la poco apetecible hija de uno de sus clientes principales? No, gracias. Pero el cliente se había empeñado, y la única forma que tenía el millonario Travis King de quitárselo de encima era casarse con otra persona.Al final, eligió como esposa temporal a Julie O’Hara, una chica sencilla que estaba desesperada y que no llamaría la atención. El acuerdo estipulaba que ella haría exactamente lo que él quisiera durante el año de duración de su matrimonio platónico… a menos que los deseos de Travis empezaran a cambiar.