Para mantenerse seguro y aprovechar al máximo su entrenamiento, siempre debe incluir un calentamiento previo al entrenamiento antes de comenzar y luego terminar con un enfriamiento para volver a poner su cuerpo en marcha.
Si tiene poco tiempo, puede sentirse tentado a omitir un calentamiento y saltar directamente a su entrenamiento. Pero hacerlo puede aumentar su riesgo de lesiones y ejercer más presión sobre sus músculos.
Al prepararse para cualquier tipo de ejercicio, ya sea un ejercicio cardiovascular, entrenamiento de fuerza o un deporte de equipo, es importante tomarse unos minutos para que sus músculos entren en modo de ejercicio. Hacerlo puede ayudarte a cosechar muchas recompensas de ejercicio.
Durante un entrenamiento, todos podemos pasar de cero a héroe y empujar con fuerza, pero la forma segura de entrenar es elevar la temperatura del cuerpo lentamente y aflojar los músculos antes de que podamos hacer algo serio. Para eso están diseñados los calentamientos. El estiramiento, por otro lado, se realiza para mejorar la flexibilidad general. Una vez que los músculos han trabajado, están en su estado más conforme y nos permiten estirarnos más de lo que normalmente ganaríamos más terreno mientras lo hacemos.
Los calentamientos son críticos para un mejor rendimiento y menos lesiones, pero el estiramiento es un extra opcional, pero es muy recomendable.
Si los ejercicios de estiramiento son parte de su rutina de ejercicios, es mejor hacerlos después de la fase de calentamiento o enfriamiento, cuando sus músculos ya están calientes. Hecho correctamente, el calentamiento y el enfriamiento pueden ofrecer ayuda para reducir el riesgo de lesiones y mejorar el rendimiento deportivo.
Los ejercicios de calentamiento y enfriamiento generalmente implican hacer su actividad a un ritmo más lento y con una intensidad reducida.
El calentamiento ayuda a preparar su cuerpo para la actividad aeróbica. Un calentamiento gradualmente acelera su sistema cardiovascular al elevar la temperatura de su cuerpo y aumentar el flujo sanguíneo a los músculos. El calentamiento también puede ayudar a reducir el dolor muscular y disminuir el riesgo de lesiones.
El enfriamiento después de su entrenamiento permite una recuperación gradual de la frecuencia cardíaca y la presión arterial antes del ejercicio. El enfriamiento puede ser más importante para los atletas de resistencia competitivos, como los maratonistas, porque ayuda a regular el flujo sanguíneo. El enfriamiento no parece ayudar a reducir la rigidez muscular y el dolor después del ejercicio, pero se necesita más investigación.
Los calentamientos siempre deben ser dinámicos, siempre use ejercicios activos para preparar nuestros cuerpos. Necesitamos que la sangre fluya, especialmente durante las estaciones más frías. Nuestros cuerpos se benefician de los estiramientos después de que ya nos hemos ejercitado (enfriar). Nuestros músculos son más susceptibles a ellos, lo que nos permite estirarnos más y mantener los estiramientos por más tiempo.